Luces

El alumbrado del vehículo cumple una importantísima doble función durante la circulación en horas de poca luz ambiental o de circunstancias atmosféricas adversas: Dotar de visibilidad al conductor del vehículo y facilitar a otros conductores que puedan ver nuestra posición.
Para evitar deslumbramientos es necesario que el reglaje de los faros sea correcto, así como el alcance o la potencia de alumbramiento de las diferentes luces que posee nuestro vehículo.
Por ello, se aconseja periódicamente revisar tanto los faros delanteros, como las luces traseras, de freno, intermitentes de dirección, luz de marcha atrás y luces de peligro.
Además, es obligatorio por las leyes de la Dirección General de Tráfico, tener en el vehículo un juego de lámparas de repuesto para poder realizar la sustitución de cualquier elemento dañado.