Puede parecer que en invierno no nos hace especial falta el uso del aire pero no está de más conectarlo de vez en cuando. Se aconseja conectarlo al menos una vez al mes y dejarlo puesto unos minutos, así evitaremos que los conductos se resequen por falta de uso.

Limpieza

Este sistema cuenta con un entramado compuesto por diferentes elementos. Lo recomendable es mantener limpio el radiador y comprobar que todas las mangueras y conductos estén en buen estado. Tampoco nos debemos olvidar del líquido refrigerante.

El gas

Sin gas, no hay aire. Ya sea por poco o demasiado uso, las fugas que se producen pueden hacer que el gas pierda sus propiedades y se consuma poco a poco. Un síntoma de que existe este problema es que, al conectar el aire, el coche tarda bastante tiempo en enfriar. Cuando esto ocurre, debes llevar el coche al taller para la correspondiente carga de gas.

Mal olor

Si dentro del coche empezamos a notar un olor avinagrado puede ser que los filtros estén pidiendo una sustitución. Los filtros se obstruyen a causa de las bacterias, el polvo y la humedad.

No lo sobrecargues

Una manera de evitar que el sistema de aire se estropee más rápidamente es evitando que trabaje al máximo rendimiento. Por mucho que la temperatura en el exterior supere los 40 grados, es aconsejable conectar el aire acondicionado a régimen medio y bajar las ventanillas unos minutos.

Buen uso

Un buen uso y mantenimiento del sistema del aire acondicionado puede ahorrar sofocos no solo en la conducción durante el verano. Así, es conveniente que la temperatura en el interior del habitáculo sea de alrededor de 22 grados. Hay que evitar poner el aire acondicionado por debajo de 20 grados, pues puede ocasionar un aumento del consumo de combustible de hasta un 20%. Y también afecta a la salud. Es muy habitual coger catarros por el aire acondicionado.

Desempañar el cristal

El uso en invierno del aire acondicionado es conveniente cuando, por ejemplo, empieza a llover muy fuerte y los cristales se empañan repentinamente. Encender el aire es clave para que se desempañe el cristal