Un estudio realizado por INTRAS (Instituto Universitario de Tráfico y Seguridad Vial) revela que el 60% de los vehículos implicados en accidentes de tráfico tenían un fallo mecánico debido al deterioro de los neumáticos.
Este dato es para alarmarse, y es por ello que desde Atlántico Autocentros queremos ayudarte a controlar el estado de tus neumáticos y a detectar cualquier posible problema que estos puedan tener.
Mantenimiento de tus neumáticos
- Vigila la presión de los neumáticos. Una presión superior a la adecuada provoca un desgaste de la zona central del neumático, aparte de reducir el agarre de este a la carretera, y una presión inferior aumenta el consumo de combustible y pierde adherencia y estabilidad, sobretodo en carretera mojada. Te recomendamos comprobar la presión por lo menos una vez al mes.
- Una parte muy importante del neumático es su dibujo. La profundidad del dibujo es la huella del neumático. Debemos asegurarnos que tiene la profundidad adecuada (como mínimo 1,6 mm) ya que una profundidad inferior al mínimo provocaría una pérdida de agarre, sobretodo en terreno mojado y provocaría aquaplaning.
Un truco para comprobar la profundidad del dibujo si no se dispone de un medidor específico es con una moneda de 1 Euro. Se coloca la moneda en una de las bandas de rodadura. Si se pueden ver las estrellas de la moneda, es hora de acudir a tu taller para cambiar los neumáticos.
- Procura evitar sobrecargar tu vehículo. Un coche está diseñado para transportar personas, las cargas pesadas se las dejamos a las furgonetas y camiones.
A continuación te detallamos cuales son algunos de los síntomas de un neumático en mal estado.
- Desgaste en la banda central: La causa de esto puede ser el inflado excesivo de los neumáticos.
- Desgaste en los bordes exteriores: Circular con menos presión en los neumáticos hace que este se aplaste contra el pavimento y provoca que los laterales, al ser la superficie de apoyo en este caso, se desgasten.
- Desgaste de un único borde: Una mala alineación de la dirección hace que las ruedas no giren uniformemente. Esto hace que los laterales del neumático se vayan desgastando rápidamente.
- Desgaste irregular: Un mal equilibrado de los neumáticos o el mal estado de los amortiguadores pueden causar un desgaste irregular. También los frenazos bruscos tienden a desgastar los neumáticos irregularmente.
En caso de circular con unos neumáticos en mal estado, acude a tu taller lo antes posible y no lo dejes pasar mucho tiempo, ya que de ello depende tu seguridad y la del resto de conductores.